GHOST STORIES

Los jugadores, mediante el trabajo en equipo, deberán exorcizar a los fantasmas que aparecen durante el transcurso del juego. Al comienzo de su turno, un jugador pone en juego un fantasma y lo coloca en un lugar libre, y más de uno puede entrar al mismo tiempo. Todos los fantasmas tienen habilidades propias: algunos afectan a los taoístas y sus poderes, otros hacen que el jugador activo tire el dado de maldición para obtener un efecto aleatorio, y otros acechan las fichas de los aldeanos y bloquean la acción especial de esa ficha. En su turno, un taoísta puede moverse sobre una loseta para exorcizar fantasmas adyacentes o para beneficiarse del aldeano que vive en la loseta, siempre que no esté encantada. Cada ficha de la aldea permite a los jugadores beneficiarse de una bonificación diferente. Con el cementerio, por ejemplo, los taoístas pueden revivir a un taoísta muerto,

Para exorcizar un fantasma, el taoísta lanza tres dados Tao de diferentes colores: rojo, azul, verde, amarillo, negro y blanco. Si el resultado de la tirada coincide con los colores del fantasma o la encarnación de Wu-Feng, el exorcismo tiene éxito. El resultado blanco es un color salvaje que se puede utilizar como cualquier color. Por ejemplo, para exorcizar un fantasma verde con 3 de resistencia, necesitas sacar tres verdes, tres blancos o una combinación de ambos. Si sus tiradas se quedan cortas, también puede usar fichas de Tao que coincidan con el color además de su tirada. Puede optar por utilizarlos después de su tirada. Los taoístas obtienen estas fichas utilizando determinadas fichas de aldea o exorcizando a determinados fantasmas. Uno de los taoístas tiene un poder que le permite recibir tal ficha una vez por turno.

Para ganar, los jugadores deben derrotar a la encarnación de Wu-Feng, un jefe que llega al final del juego. También hay niveles de dificultad más difíciles que agregan más encarnaciones de Wu-Feng, en el que para ganar, debes derrotarlos a todos.

Sin embargo, hay muchas más formas de perder. Los jugadores pierden si tres de las fichas de la aldea están encantadas, si la pila de robo se vacía mientras la encarnación de Wu-Feng todavía está en juego, o si todos los sacerdotes están muertos.

numero de cartas : 65 (56 x 87 mm)

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